Description
1954, SALVADOR DALÍ 51 AÑOS
A partir de 1954, muchos de los discursos y obras de Dalí giraron en torno a una nueva obsesión: el cuerno de rinoceronte. Según el pintor, este elemento contenía “las más vidimas proporciones de la naturaleza, el trazo de Dios”, y estaba presente en uno de sus cuadros preferidos” La puntaire de Veermer. La fijación de Dalí por los cuernos de rinoceronte fue un episodio más en la carrera del pintor hacia la máxima notoriedad. Demostrando un gran dominio de la lógica de los medios de comunicación, el artista preparaba a conciencia cada una de sus apariciones públicas. El pintor era capaz de encargar una barra de pan de 12 metros para publicitar una conferencia o de presentarse a una charla a bordo de un Rolls-Royce repleto de coliflores. Todo valía siempre que se atrajera la atención.